Aunque no está permitido que personas ajenas al Congreso utilicen las tarjetas de carga de bencina que financia la Cámara de Diputados, esposas, hijos y conocidos de los parlamentarios las ocupan para cargar combustible.
Ciper Chile published this investigation into the abuse of fuel allowances by parliamentarians and their families. As if their obscene salaries aren’t sufficient.
Just one of many perks that these parasites enjoy.